La jefa de la organización Tupac Amaru, Milagro Sala, aseguró ser “la única oposición” política en Jujuy al gobierno de Gerardo Morales porque, dijo, “el peronismo está cagado de espanto” y volvió a cuestionar al mandatario al endilgarle un supuesto plan para hostigarla en la cárcel donde está detenida desde hace un año.

 Asimismo, pidió disculpas a sus seguidores por la autoagresión que se infligió con unas tijeras en la panza la semana pasada al argumentar que “fue una consecuencia de las causas que me están fabricando”.

Y, en diálogo con radio Rebelde desde el teléfono compartido del penal de Mujeres de Jujuy, aclaró que el incidente “nunca fue una pelea por liderar acá en el penal, no me interesa acá liderar nada, estoy para hacer otras cosas, estoy escribiendo un libro”.

“No me interesa ver quién manda en el pabellón, no me interesa un pepino”, añadió la dirigente kirchnerista que es investigada en varias causas por extorsión, asociación ilícita y amenazas, entre otras, por el aparente desvío de fondos que enviaba el gobierno nacional para que sus cooperativas levanten casas.

Al acusar al gobernador Morales por el supuesto plan para hostigarla, dijo que “lamentablemente acá nos están apretando demasiado (...) han pagado a una mujer para que me hostigue permanentemente adentro del penal. Continuamente están provocado para que uno reaccione”, sostuvo. En ese marco, apuntó a una interna “de apellido Maldonado” cuyo abogado estaría ligado al gobierno provincial.

Sala afirmó que ante sus supuestos embates los presidiarios no intervienen porque “tiene orden de arriba” y cuando en el programa del ex jefe de la Sedronar Juan Carlos Molina le preguntaron de quién era esa orden respondió: “De Gerardo Morales, de quién va a ser”.
 
“Acá en Jujuy no hay oposición, el peronismo está bajo la cama, cagado de espanto y la única oposición soy yo”, afirmó Sala. También confirmó el episodio en el que se autoagredió cuando la notificaron de nuevas causas judiciales y aseguró que primero agarró “un cuchillo” que logró sacarle una compañera y luego tomó “la tijera” con la que finalmente se lastimó aunque, “no mucho”, confesó.

“La tijera fue consecuencia de las causas que me están fabricando. Nunca fue una pelea por liderar”, acotó. Y, apuntó que “es una locura lo que están haciendo. Por eso hice lo que hice. Me puntié el estómago, estoy podrida de que me llenen de causa y nadie haga algo. Me tuvieron durante un año completo hostigándome la prensa, hay doce causas que me han inventado”.

“Cada 33 días me inventaron causas, da muchísima bronca. Y es gente que están pagando para que me denuncien”, añadió en el marco de su estrategia defensiva luego de que varios cooperativistas revelaron que eran obligados a endosar los cheques que recibían para levantar obras a nombre de dirigentes de la Tupac Amaru.

Tras el incidente del miércoles pasado, Sala deberá someterse a una serie de estudios clínicos y psiquiátricos a partir del viernes con especialistas del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema.

Los expertos se reunirán con Sala en la unidad carcelaria 3 donde cumple prisión preventiva