Miércoles 17 de Abril de 2024

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15 de junio de 2018

Naturopatía y Terapias Naturales

Muchas personas hoy en día optan por cuidar su salud de una manera diferente. Cada vez más, recurren a las llamadas Terapias naturales, término que engloba varios métodos complementarios o alternativos a la medicina convencional. A su vez, muchos acuden a profesionales de la Naturopatía.

Estos métodos se caracterizan por buscar un cambio del estilo de vida mediante el higienismo nutricional, el ejercicio físico, el contacto con los elementos, etc., y, en caso de incorporar otros agentes como cuando se utiliza herboristería o aromaterapia, se favorece el uso de productos de origen natural, bajo manipulaciones específicas que respetan el comportamiento innato del cuerpo. Se trata de numerosas terapias diseñadas para atender a cualquier edad, diferentes tipos de patología, físicos o psicológicos, temporal o crónicos. ¿Qué es la Naturopatía? Podemos definir a la Naturopatía como un sistema científico-médico-filosófico no convencional que tiene como objetivo equilibrar el funcionamiento del cuerpo por medios naturales. Estos pueden ser la dieta, cambios estilo de vida, medicina herbal, masajes, ejercicios, etc.. Sus métodos se basan en una ciencia esencial que comprende el estudio, el conocimiento, la enseñanza y la práctica de las leyes de la vida y donde se considera que el cuerpo humano tiene la capacidad de autocuración. Promueve un enfoque holístico para el cuidado de la salud, ya que se hace un análisis completo de la persona en todos sus niveles: físico, psíquico y energético.   Como objetivo, podemos decir que la Naturopatía busca que la persona consiga hacerse responsable de su propia salud, mediante la adhesión a las prácticas saludables, con principios en el naturismo e higienismo. Es el concepto de “doctor como docente”, un profesional que ayude a la persona a hacerse cargo de su propio bienestar.  En última instancia, y como compromiso social, se llegaría a una mayor consciencia de los patrones culturales que son causa de malestares, y se elevaría la calidad de vida general de la población.   Es importante aclarar, claro está, que existen patologías complejas que no pueden ser tratadas por estos métodos y requieren, sin falta, atención de un profesional alopático.   Principales usos En Naturopatía, se tiene en cuenta al individuo como un todo: físico, emocional, psíquico, energético y su entorno. Más concretamente, se puede utilizar para luchar contra patologías como:   Alergias Dolores de cabeza Trastornos digestivos Problemas psicológicos Obesidad Desequilibrios hormonales Dolor crónico Síndrome de fatiga crónica Sin embargo, existe una diferencia en el enfoque de la Naturopatía respecto a la medicina tradicional, e incluso al de muchas ramas de la Medicina Naturista: la atención se centra en la salud, no en la enfermedad.   Esto quiere decir que no se hacen tratamientos sintomáticos. Un naturópata no se encarga de “prescribirte” una hierba, un ejercicio, una sesión de masajes, etc. para aliviar una de las problemáticas mencionadas en particular. Lo que realmente interesa es el reestablecimiento del balance y la salud general. Por eso, la Naturopatía trata individualmente a cada persona. Incluso si dos personas presentan la misma patología, los consejos naturopáticos serán diferentes y personalizados. A la vez, se puede indicar junto con un tratamiento de medicina convencional y en ningún caso se supone que este método reemplace el control de los profesionales de la salud. Si tienes indicaciones específicas de tu médico de cabecera, alguna medicación, por ejemplo, lo correcto es que el naturópata no busque reemplazarla, sino complementarla.   ¿Naturopatía o Terapias Naturales? Si bien a menudo se utilizan los términos Naturopatía y Terapias Naturales de forma intercambiable, no necesariamente son sinónimos. Al echar un vistazo a los criterios clasificación de medicinas no convencionales, ambas se encuentran dentro de la categoría de “sistemas médicos alternativos”, en referencia a su completo corpus teórico y práctico, con un enfoque holístico e integral en ambos casos. También en esta categoría encontramos, por ejemplo, el Ayurveda y la Medicina Tradicional China.   Los principios de la Naturopatía establecen como pilares fundamentales respetar las Leyes Naturales, y asegurar que nuestras funciones principales puedan llevarse a cabo correctamente (respirar, comer, descansar, eliminar residuos, etc). Proponen, como base para mantener la salud, una alimentación moderada y correcta, la búsqueda de propios patrones de conducta que den origen a patologías y malestares, el rechazo al estilo de vida sedentario, la purificación del aire viciado en el que solemos estar inmersos, evitar vicios incontrolables, etc.   Más allá de estas pautas, que pueden parecer obvias pero por eso mismo a menudo obviamos, se propone valerse de la ayuda ocasional de técnicas tales como las curas de agua o la herbolaria… que vendrían a ser parte de lo que llamamos, justamente, Terapias Naturales. Como notará el lector, puede ser díficil hacer una delimitación precisa, ya que este último es un término bastante amplio y abarcativo.   Naturopatía como formación profesional Hoy en día, y en la práctica, las Diplomaturas y demás formaciones profesionales avaladas por instituciones universitarias y de prestigio, presentan una formación del Naturópata que engloba prácticas diversas. En estos ciclos que incluyen principios de Ayurveda, y técnicas varias como Acupuntura, Shiatsu, Flores de Bach, Iridiología, Qigong, e incluso algunas más modernas como la Ozonoterapia.   A menudo, la currícula también incluye formación en algunas áreas. Principios de psicología, por ejemplo, como así también conocimientos de cardiología, biología, sintomatología, etc. Esto permite un perfil profesional más completo. En otros casos, la Naturopatía se encara como estudio de Posgrado, o Master, a modo de ampliar conocimientos previos en técnicas naturales, e incluso como especialización posterior para graduados en medicina convencional. Esto suele darse en países donde no se permite acceso a su estudio ni ejercicio a quienes no sean profesionales sanitarios, por lo que los doctorados en naturopatía están tan formados como un médico clínico, por ejemplo, solo que eligen la medicina natural como especialización.   Técnicas utilizadas El profesional de Naturopatía o Terapias Naturales puede valerse de diversas técnicas, según la necesidad, afección o control de la persona. Entre ellas, podemos mencionar:   Higiene nutricional: ajuste de alimentos, curas estacionales Psicología: relajación, manejo del estrés, sofrología, análisis de la conducta Ejercicios físicos: gimnasia suave, caminatas, yoga, estiramiento Ciencia de plantas: en forma de aceites esenciales, aceites vegetales, en infusión, maceración, decocción, extracto fluido o seco, Flores de Bach, herbolaria en general. Hidrología: baños, ducha de temperatura variable, baño de vapor, talasoterapia, curas de agua Técnicas manuales Técnicas de reflejos: reflexología, shiatsu palmar Técnicas de respiración: método Buteyko, Pranayama Tecnologías energéticas: magnetismo, Qigong Técnicas de vibración: por colores o Cromoterapia, radiación solar y lunar, infrarrojos Ventajas de las terapias naturales El uso de la medicina natural a través de numerosas terapias, tiene muchas ventajas, las más significativas son:   Respeta el funcionamiento fisiológico del ser humano. Actúa preventiva y curativamente, restableciendo la armonía y la salud. Son totalmente personalizadas, por lo que pueden ser indicadas para todas las personas desde bebés hasta ancianos, incluso para los animales. Los que requieren determinadas ingestas son seguros si se respeta la dosis prescrita. No dan lugar a ninguna adicción. Gracias a su enfoque holístico y personalizado, no tiene contraindicaciones. La naturopatía es complementaria a la medicina alopática y trabaja en conjunto con esta.

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