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29 de Marzo de 2024
MUNDO
16 de agosto de 2018
Orinales de color rojo brillante, completamente expuestos a la vista de los transeúntes, fueron colocados en la ciudad para reducir la incidencia de personas que orinan en plena calle.
Un urinario en particular, colocado cerca de la archiconocida catedral de Notre Dame y que puede ser visto desde los barcos turísticos, ha sido objeto de críticas.
Los residentes furiosos piden que se retiren los urinarios y planean presentar una petición formal ante las autoridades competentes.
"No hay necesidad de poner algo tan impúdico y feo en un lugar tan histórico", dijo a la agencia de noticias Reuters Paola Pellizzari, propietaria de un concesionario de arte localizado en las cercanías de la catedral.
"Está al lado del edificio más hermoso... el Hotel de Lauzun", dijo. Y mostró preocupación de que los nuevos urinarios "inciten al exhibicionismo".
"Es horrible", dijo otro residente. "Nos dicen que tenemos que aceptar esto, pero esto es absolutamente inaceptable. ¿Las personas no pueden comportarse?".
Derechos de autor de la imagenAFP
Image captionLa palabra "uritrottoir" es una combinación de dos términos en francés: urinal y pavimento.
Pero el alcalde local, Ariel Weil, dice que los orinales son necesarios.
"Si no hacemos nada, los hombres simplemente van a orinar en las calles", dijo a Reuters. "Si realmente está molestando a la gente, encontraremos otra ubicación".
Los también llamados "orinales inteligentes" fueron instalados en puntos de la ciudad donde el problema de las personas que orinan en lugares públicos es más preocupante.