"Hay una infinidad de irregularidades sobre la aptitud, condiciones y pertinencia técnica del emplazamiento de este complejo habitacional. La más importante, quizás, asociada al reciente evento hidrológico, responde a que la aptitud de zona cuenta con observaciones por parte de la Dirección de Hidrología de la Provincia y, por ende, no cuenta con el certificado de no inundabilidad. Y, consecuentemente, la Municipalidad de la Capital desaprobó la construcción de viviendas”, enfatizó Marchioli.

El jueves pasado ocurrió una creciente menor del río El Tala-Ongolí que dejó aislados a los residentes de la recientemente inaugurada Ciudad Satélite, que en la actualidad cuenta con alrededor de 450 familias que ya tomaron posesión de sus viviendas. 

"Las emociones de la gente no se limitaron al enojo, la bronca y el miedo, sino a una profunda preocupación que los inquieta y -con sentido común- lo expresaron a través de los distintos medios de comunicación y redes sociales: ‘si este suceso ocurre en el período seco, cuál será la situación en pleno período húmedo’, se preguntó más de uno; con justa razón”, opinó el geólogo.

Marchioli indicó, además, que lo resuelto por los organismos oportunamente intervinientes –en el rechazo a la realización de la Ciudad Satélite- puede justificarse solo con observar la imagen satelital y predecir el comportamiento del río El Tala-Ongolí y sus afluentes. Estos últimos atraviesan los terrenos donde se emplaza el complejo habitacional. (Ver imagen con los cursos de agua marcados). 

"Si bien el río que corre en dirección norte-sur -en la zona sujeta de análisis- en primera instancia no constituirá una amenaza de inundación sobre los terrenos ubicados sobre la margen Sur, pero como ha quedado demostrado, oficia de un obstáculo para la libre circulación de las personas y los servicios públicos de Salud, Defensa Civil, Bomberos y Seguridad. Con estas particularidades es evidente lo perspicaz y ocurrente nombre con el que se fecundó el proyecto: Ciudad Satélite”, subrayó.

En riesgo 
El profesional también precisó que una situación muy diferente responde a los afluentes del río El Tala-Ongolí de sentido sureste, que atraviesan los terrenos donde se emplaza el complejo habitacional. "Constituyen una amenaza por corrientes torrenciales y procesos de avulsión (aluviones)”, advirtió.

Marchioli sostuvo que si la zona no posee aptitudes para el emplazamiento de un complejo habitacional, ¿cuáles habrán sido los criterios sociales, técnicos, económicos y ambientales para seleccionar la zona de emplazamiento para la construcción 4.000 viviendas? 

"Cualquier persona con sentido común y exiguos conocimientos de planificación urbana puede advertir algunas situaciones y criterios básicos que condicionan la selección de un sitio para la construcción de viviendas”, reflexionó.  

Mala inversión 
El geólogo recordó que el Estado debió afrontar una fuerte inversión en la zona. "Por la necesidad de dotar de accesos, obras hidráulicas (puentes y desagües), agua potable, energía eléctrica, cloacas y servicios: educación, salud, transporte, alumbrado público, recolección de residuos y seguridad. Incluso, con el mismo dinero se estima que podrían realizarse un 30% más de viviendas, es decir, 1.200 casas más", concluyó Marchioli.
 
 Interrogantes 

Marchioli señaló también en el informe que es "inquietante” no poder suponer cuáles han sido los criterios para seleccionar ese lugar de emplazamiento para la Ciudad Satélite, pero que de igual forma se puede concluir  –sin lugar a dudas- que no se encuentra entre los principales parámetros para realizar una obra de esa magnitud: un lugar de emplazamiento que permita una menor dispersión de la trama urbana, consolidación y mejora de los servicios de los vecinos de la ciudad. El geólogo acotó que surgen otros interrogantes: 
-El puente que proyecta unir la avenida Los Minerales con el complejo habitacional, ¿está diseñado para no obstaculizar las crecientes ordinarias y extraordinarias?
-¿Se ha considerado el reciente informe presentado en la Jornada Provincial de Investigación de Recursos Hídricos sobre la delimitación de las zonas de riesgo por crecidas del río El Tala?
- Las obras de conducción de los afluentes que atraviesan la zona y los desagües pluviales, ¿han sido diseñados para contener las crecientes?
- ¿Cuál es el plan de mantenimiento de las obras de conducción y desagüe?
 
 
6 mil lotes

El geólogo aseguró que en la ciudad Capital existen alrededor de 6.000 lotes que comprenden los llamados ‘vacíos urbanos’, por lo que había otras alternativas para solucionar la demanda de viviendas.

FUENTE: El Ancasti