Después de la calificación de "impostor" que le hizo el presidente Mauricio Macri, el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, eludió la respuesta puntual a esa expresión y, en una conferencia de prensa desde el Congreso, anunció que le envió una carta al jefe de Estado invitándolo a "reflexionar juntos sobre los recientes acontecimientos".

Acompañado en el Salón "Delia Parodi" por los diputados Graciela Camaño, Felipe Solá, José Ignacio De Mendiguren y Cecilia Moreau, entre otros, dijo que su espacio político ha "contemplado responsablemente los intereses del Estado nacional y de las provincias", que ha colaborado en la sanción de muchas leyes impulsadas por el Ejecutivo y que durante el año legislativo buscó consensos.

"Esta dinámica se quebró el martes pasado, cuando usted les ordenó a sus diputados no discutir la posibilidad de un proyecto consensuado sobre la disminución del impuesto a las Ganancias para los trabajadores, usted y sus diputados saben que esta es la verdad", le dijo a Macri en la misiva.

No obstante, aseguró que el bloque del FR-UNA está dispuesto "a seguir trabajando si el gobierno deja su postura intransigente y se dispone a pensar en los trabajadores".

Después de la lectura de la carta, que se entregó en la tarde de ayer en la Casa Rosada, respondió preguntas de los periodistas, pero evitó polemizar con el Presidente.

"Los problemas de la Argentina están en el presente, no en el pasado ni en el futuro". También eludió una definición sobre la eventualidad de un veto presidencial a la ley, si finalmente se sanciona tal como la aprobó la Cámara de Diputados. Sobre el debate en el Senado, Massa negó intentos de su parte para influir sobre la decisión de los legisladores. "No hablamos ni vamos a hablar con los senadores. Queremos ser respetuosos de las decisiones institucionales", aclaró.