Con cuatro meses a cargo de Aerolíneas Argentinas, Mario Dell’Acqua, admitió que "es posible" que se reprivatice la empresa, que había sido recuperada por el Estado durante el gobierno kirchnerista, tras la gestión de la compañía española Marsans.

Igualmente, aclaró por ahora que "no se está estudiando la posibilidad". El sucesor de Isela Constantini, la ex presidenta que renunció a su cargo en diciembre, sostuvo que "uno de los compromisos que asumimos es bajar la cantidad de fondos necesarios que el Estado nos aporta. El objetivo es llegar a 2019 con una empresa en equilibrio".

En este sentido, Dell’Acqua aclaró que la apuesta a reducir costos no se traducirá en un plan de despidos como sucedió entre otras empresas del Estado. "Reducir costos puede ser viable, va a ser viable y lo vamos a hacer con todos nuestros empleados a bordo", prometió.