"Esto es divide y reinarás", aseguró al, aún, presidente del PJ José Luis Gioja momentos antes de abandonar la sede del partido. Con un cordón policial entre los periodistas y el diputado nacional, se replicaron los incidentes que se habían registrado durante la tarde, luego de que la jueza María Servini de Cubría, que ordenó la intervención del espacio político, dispusiera "la implantación de un servicio policial que impida nuevos ingresos al local partidario y permita la salida irrestricta".

"Lamentamos lo que está pasando, no lo creamos nosotros", comenzó Gioja ante la prensa y aseveró que se encontraba compungido  porque "en vez de estar peleando por los problemas del país, tenemos policías en la puerta". En tanto, aseveró: "No estamos atrincherados, estamos trabajando dentro del partido y cuando terminemos de trabajar, nos vamos a ir y vamos a volver".

Tras empujones y patadas a la prensa, de parte de los efectivos apostados en la puerta del edificio, el diputado nacionales aseveró: "Les pido disculpas por la actuación de la policía, que no es la mejor, pero nosotros no le echamos la culpa a ellos". "Esto es divide y reinarás", sentenció y añadió: "Nosotros vamos a terminar de trabajar, que es lo que estamos haciendo ahora, porque estamos armando la reunión de mañana".

"En media hora o una hora nos vamos a terminar", adelantó Gioja y añadió, dirigiéndose a los uniformados, "les pido a ustedes muchachos que no nos jodan y que nos dejen salir en paz". En tanto, ante la consulta de la prensa sobre los futuros pasos, afirmó: "Vamos a apelar mañana a las 7,20 de la mañana, porque cuando fuimos al mediodía no nos recibieron porque cerraba" y advirtió que "si la Sala ratifica lo que dicho, vamos a acatar".

Para finalizar, el, por el momento, presidente del PJ nacional aseguró que "de todos los PJ del país se comunicaron para mostrar su solidaridad, al igual que por parte de varios dirigentes de Latinoamérica". "Esto es una afrenta a la democracia", reiteró, ya que según advirtió, "tener que hablar con policías delante es una bofetada a la democracia".