Viernes 29 de Marzo de 2024

POLITICA

17 de julio de 2015

"Todo aquel que se niega a las órdenes del Poder Ejecutivo termina desplazado"

Esa fue la coincidencia de especialistas y políticos al analizar el apartamiento del juez Claudio Bonadio de la causa Hotesur. "Con esto demuestran que algo esconden", aseguraron

La Sala I de la Cámara Federal porteña, con los votos positivos de Jorge Ballestero y Eduardo Freiler, decidió el apartamiento del juez Claudio Bonadio de la causa Hotesur, en donde se investiga a la familia Kirchner por presunto lavado de dinero. El tercer integrante de la Cámara, Eduardo Farah, votó por la continuidad.

Los cuestionamientos desde la oposición no tardaron en llegar, sobre todo por la sensibilidad de la causa y por tratarse de la misma sala que desestimó en su momento la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman sobre Cristina Kirchner.

Consultada  Silvina Martínez, ex directora del Registro Nacional de Sociedades de la Inspección General de Justicia (IGJ), aseguró que el Poder Judicial es el nuevo enemigo del Gobierno: "Está pasando lo que pasó en los distintos organismos de la administración pública. Empezaron por distintos sectores y hoy se fue masificando. Todo aquel que se niegue a las ordenes del Poder Ejecutivo, todo aquel que se anime a investigar, que ponga en tela de juicio el relato, termina siendo despedido, desplazado, difamado, denunciado y perseguido".

Sobre si esto es una victoria para el kirchnerismo, Martínez explicó: "Estamos analizando con Stolbizer apelar a la Cámara. Hay que ver si los fiscales pueden presentar algún recurso, estamos viendo de qué manera poder seguir instando acciones".

Por su parte, María Eugenia Talerico, abogada y miembro de la ONG Será Justicia, fue muy dura con Freiler y Ballestero, los jueces que votaron apartar a Bonadio: "Me animo a decir que es un acuerdo, alguna situación que sucede en esa sala donde reiteradamente hemos visto este comportamiento. Es una sala muy funcional. Todos los fallos son beneficiosos para los intereses del Gobierno".

Y agregó: "Este caso es altamente preocupante (para la Presidente) no solo por la investigación de gente de su familia sino porque las pruebas son para preocuparse".

Del mismo modo, no se mostró confiada en el futuro de la causa: "Creo que se va a ir al sur, por lo cual en Hotesur no vamos a ver justicia. Pero a la larga, algún día, vamos a reaccionar. Es muy difícil ver a funcionarios públicos involucrados en casos que lleguen a algún resultado, con lo cual no sé si es una ganancia (para el kirchnerismo), pero logró el objetivo".

"Tenemos elecciones y ojalá muchos de nosotros podamos ver estas situación y elegir bien. No sé qué va a pasar con estos jueces que tienen muchos callos en su haber así que hay que ver que pasa con el cambio de gobierno. Por ahora están ahí, son jueces de la Constitución", concluyó.

La diputada nacional del PRO Laura Alonso fue contundente: "Desde mi análisis y desde el sentido común, esto demuestra su culpabilidad. Lo único que hace la familia presidencial con todas estas recusaciones y ahora esta presión sobre la sala que decide apartar a Bonadio es demostrar que algo esconde y que probablemente en esa investigación se puede imputar o acusar al hijo de la Presidente o a la propia Presidente por lavado de dinero".

Sobre cómo se llegó a este fallo, la diputada precisó: "Acá evidentemente lo que ha habido desde el minuto uno de parte de la familia presidencial es un intento por apartar a Bonadio. Es lo que buscó la sobrina de la Presidente, Romina Mercado, con sus presentaciones en la causa y llevar la investigación de la justicia a Santa Cruz. De alguna manera lo que hoy sucede es el punto máximo de acciones que se han venido dando en los últimos meses".

"Es el caso que más preocupa a la Presidente y por eso este apartamiento tan sorpresivo, aunque no nos sorprende. Hay un fiscal de Cámara, que es Moldes, quien seguramente presente un recurso de Casación. Así que más allá del sorteo, todavía no está dicha la última palabra respecto de Bonadio", puntualizó la funcionaria.

Y finalizó: "No es una batalla ganada para el Gobierno. Al contrario, es la gran derrota. Con esta movida lo único que hace la Presidente y su hijo es mostrar la desesperación por una investigación que los puede complicar en el futuro".

 

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